Escala Kelvin:
5250K (Luz del sol)
4200K
3850K
3500K
3200K (Bombilla de halÓgeno)
2600K (Bombilla incandescente)

La escala de Kelvin es una medición utilizada para describir la tonalidad de una fuente de luz. Esta medida no necesariamente está relacionada con el calor proporcionado por la fuente de luz, sino con el color de la luz. Mientras más alto el valor Kelvin de la fuente de luz, más se acerca al color de la luz solar.

Focos que proporcionan 3500K o menos tendrán una tonalidad ámbar,  entre 3500K y 4100K tendrán una tonalidad blanca y por último con 4200K o más tienden a tener la tonalidad de la luz del sol. Los focos utilizados hoy en día pueden variar el valor Kelvin alterando la composición y materiales del vidrio. Mientras más alto sea el valor Kelvin mayor será la visibilidad nocturna ya que la cantidad de luz ofrecida cubre una gama ancha del espectro de luz visible. En cambio los focos con valores más bajos en la escala Kelvin, trabajan mejor en condiciones de neblina o lluvia.